domingo, 14 de setiembre de 2008

Amara Lakoush y más

Bueno, les dije que un novelista iba a hablar con nosotros. Este novelista, Amara Lakoush, contestó nuestras preguntas sobre su novela y la inmigración por una hora. Él tiene una historia interesante. Nació y creció en Argelia, pero se inmigró a Italia después de la universidad por razones políticas. No hablaba italiano, pero lo aprendió en dos meses (para ser justo, ya sabía el francés bien porque su universidad estaba en francés). Se matriculó como posgraduado y está listo para terminar con su tesis


Ahora, ocho años más tarde, acabó de recibir su ciudadanía italiana hace tres meses.Nos dijo que piensa que es la hora para mudarse a otro país. Sin embargo, dijo que en cualquier país está, escribirá en italiano. ¿Por qué? Según él, es una deuda: el italiano y la Italia salvaron su vida. Me gustaron sus respuestas y pidió una foto con él. Ahora tengo dos, pero me di cuenta de que cuando le pidió la foto, usaba la forma de “usted” (el equivalente) para mujeres. No obstante, me imagino de que él me entendía.


El jueves, fuimos a una escuela para hablar con maestros de Di Donato. Di Donato es una escuela en Esquilino, un barrio étnico; Piazza Vittorio está cerca de la escuela. Antes visitamos a la escuela para hablar con la Asociación de los Padres. Esta vez, los maestros explicaron la estructura de la escuela y el distrito (que se llama “escuela” también). Luego, les preguntamos sobre la universidad, el multiculturalismo y el lenguaje dentro de la escuela. Tuvimos un descanso en el medio y nos dieron tentempiés y bebidas. Después, la clase fue a un restaurante eritreo. La comida fue un poquito picante, pero me gustó. El resto del día tuvimos para nosotros y fui de compras para tarjetas postales y regalos. Hablé con mis compañeras de cuarto sobre la clase y nuestras experiencias. Aún más tarde, caminó por Trastevere (nuestro barrio) con Megan y Sterling. Fuimos a una tienda de vino y chocolate, y una gelatería que tiene gelato de soya.


El viernes tuvimos clase en el UWRC. Manka (nuestra profesora) nos dio una charla sobre las lecturas de la clase y lo que habíamos hecho en Roma. Habló también de las comparaciones entre los EE.UU. e Italia y cómo debemos tener cuidando cuando los comparamos. Por la tarde hablamos como una clase sobre nuestras experiencias y como nuestras esquemas de referencia han cambiado. Para la cena, fui al mismo restaurante indiano como antes con Anjali, Megan y Sterling. Recibimos champañ gratis. Empezó de llover y tronar, y la tormenta dejó el restaurante sin electricidad por unos momentos. Cuando regresamos al apartamento, salteábamos por los charcos.


Ayer, fui a la cuidad del Vaticano con Sterling, Anjali, Manmeet, Emelia, Irene y Jasmine. Fuimos al museo, la Capilla Sextina y la Basílica de San Pietro. Tuvimos casi 200 fotos, pero muchas son borrosas y tengo que borrarlas. Fuimos como parte de una visita guiada. Me gustó la guía porque siempre quiero aprender más sobre las cosas que veo. Sin embargo, no me gustó la Basílica tanto porque no me pareció como una iglesia. Había muchos turistas irrespetuosos y guías con sus grupos (aunque en teoría no se permiten en la Basílica). En las otras iglesias que he visitado, aún la Basílica de San Francisco (una gran destinación turística también), todavía hay un ambiente religioso que no me sentí ayer.


Por la noche fui al restaurante coreano con Anjali y Irene. Ella es la segunda persona que no vive con nosotras que ha venido a Trastevere para pasar el tiempo con nosotros. Todos siempre dicen “Pero Trastevere es tan lejos” y cosas así. (Trastevere está 10 minutos lejos por caminar o 5 minutos por autobú). Nos divertimos y Irene va a convencer a otra gente que deba venir aquí. Hoy fuimos al mercado de pulgas y compré un cinturón. Llovía otra vez. Ahora no sé…



Hasta pronto...

miércoles, 10 de setiembre de 2008

El centro de refugiados y el ministerio de la instrucción pública

Aquí hay otra foto (mejor) del jardín, con toda la gente que vino. De la izquierda: hombre desconocido, Megan, yo, Trina, Sam, Anjali y Brukab.



Ya escribí un poquito sobre la enfermedad de la directora el lunes. Todavía no sabemos mucho, pero hoy ella va otra vez al médico para aprender más sobre lo que pasó. Ayer tuvimos que ir a un centro para refugiados políticos sin ella. Nos preocupamos de perdernos en ruta, pero encontramos el centro sin problema. Después de llegar, un hombre que trabaja allí nos contó sobre el centro y nos dio tareas para hacer. El centro es sólo para hombres y la mayoría es de Afganistán como resultado de la guerra allí. Abrió hace una semana, y es un lugar donde los refugiados vienen para desayunar, afeitarse, mirar la tele o películas, dormir, leer, pasar el tiempo con amigos, o jugar ping-pong, ajedréz, o futbolín (fútbol de mesa). A veces hay clases de inglés o italiano también. La ley italiano no permite que refugiados políticos trabajen, pues es difícil ganar dinero para vivir, y tienen problemas a veces con la policía por “holgazanear” y cosas así. Sin embargo, el centro sólo está abierto de las 10 de la mañana hasta las 4 de la tarde.


La tarea mía ayer fue dar afeitadoras y espuma a los refugiados que las querían. Me aburrió un poquito, porque había mucho tiempo cuando nadie venía. Cuando alguien sí venía, le preguntó en inglés (me parace más hablado que el italiano) y con las manos si quisieran una afeitadora. Si no, tuvimos que encontrar una manera de comunicar qué quería. Muchos hablaban inglés, pues no fue un gran problema. Los que no, fue más difícil. También fue difícil decir “no” a algunas pedidas por las reglas del centro, porque fue más difícul explicar por qué no podía darles lo que querían. Después de un rato, encontré a otra persona para hacer la tarea y fui para circular y hablar con ellos. Hablé con algunos. Sus historias fueron tristes, pero intentaban mantenerse feliz. Un hombre me explicó lo que él quería así: “Yo quiero una vida buena y feliz, pero no sólo para mí. En mi lenguaje, tenemos el dicho que ‘Si una flor florece, no es la primavera. Todas las flores necesitan florecer para tener la primavera.’” Me parece un sentimiento bonito.


Más tarde, fuimos al Ministerio de la Instrucción Pública para hablar con algunos funcionarios del gobierno. Fue intimidante pero fascinante a la vez. Aprendé bastante sobre la posición del gobierno con respeto a los estudiantes que son inmigrantes o hijos de inmigrantes, y sobre el el sistema educativa aquí en general. En algunas maneras es una política de no o poco intervención, pero este año es “El año del diálogo intercultural.”


Hoy, mi tarea en el centro fue dar te a los refugiados. Después, jugué futbolín por un rato. Gané un juego y perdí el otro. Luego, dibujé un poco y transformé los dibujos a grullas de papel. Algunos hombres me preguntaron qué fue, e intentó explicar el simbolismo. No hablaron tanto inglés, pero creo que entendieron el punto básico de lo que dije. Después, hice una carta para la directora con la clase mía y jugué el futbolín más. Jugué ping-pong con un hombre también; no soy buena, pero nos divertimos.


Más tarde vamos a hablar con un novelista que escribió sobre los inmigrantes en Italia. Su novela va a aparecer en inglés el octubre (no sé sobre el español) y se llama “de las civilizaciones sobre un en Piazza Vittorio.” La Piazza Vittorio es el marcado con muchos inmigrantes del cual escribió en los correos electrónicos, y es donde fuimos para entrevistar a inmigrantes antes.



Hasta pronto...

martes, 9 de setiembre de 2008

El jardín del Museo

De la izquierda a la derecha, Anjali, Trina, yo (claro) y Megan.

No entiendo cómo subir fotos muy bien, pero después de entenderlo, pondré más.

El fin de semana

Este fin de semana hice mucho. Fui al Colosseo con mis amigas Anjali y Megan. Nos divertimos mucho con tomar fotos y leer la historia de las cosas en la galería, pero para mí, el Colosseo me parece más grande cuando estoy fuera. Es difícil imaginar 50,000 personas en un solo lugar sin imágenes de cómo parecería. Como las otras ruinas de Roma, cuesta pensar en cuánto tiempo ha estado allí. No obstante, me gustó bastante.

El sábado fui a Assisi (Asís en español) con Megan. Assisi es un pueblito en las cierras del centro. Es famoso por San Francisco y Santa Clara, y Megan me dijo que está precisamente en el centro de Italia también. Se conoce a San Francisco por fundar la Orden Franciscana (católica) y su amor por la naturaleza, los animales y la paz. El pueblo tiene 3 iglesias relacionadas, como la Basílica de San Francisco. Megan y yo fuimos a las 3. Me gustaron todas… Además, el pueblo su mismo me encantó. Es un pueblo bellísimo y me hice pensar que yo debo vivir en el campo (no se preocupen—no va a pasar, amo Seattle demasiado). Aún el viaje en el tren estaba bonito. Me arrepiento de no haber pasado más tiempo allí—me gustaría ver el amanecer y el atardecer allí. Un día regresaré.

El domingo fui a la misa católica. No soy católica, pero el catolicismo es una gran parte de la cultural italiana—hay clases del catolicismo en la escuela pública. Quería oír un órgano también. Hacía calor en la iglesia, pero me interesó el oficio. Después, fui al Museo Borghese con algunos amigos. Hay que hacer una reserva y llegar 30 minutos antes de la hora para entrar... Llegamos justo a tiempo, pero sólo después de caminar-correr por 10-15 minutos.

Cuando entrábamos, miraba las estatúas y las paredes del primer salón con admiración. Hasta mi amiga Trina me dijo <>. El techo del salon estaba pintada con imágenes de ángeles y nubes, y estaba un cuadro allí en el medio. ¡! Claro que disfruté del arte. Mis favoritos son “Apolo y Daphne,” de Bernini, y la serie “Los Amores del Júpiter,” por Caraveggio. El museo tuvo una exposición especial sobre Caraveggio con mucho de su trabajo. Descubrí que a mí me gusta las estatúas más que los cuadros. :) Cuando terminamos, fuimos al jardín del museo y nos relajábamos. Como ya era la hora de cenar, fui a cenar con Anjali, Brukab y Sam en.... ¡¡McDonald’s!! Todos los supermercados estaban cerradas porque fue el domingo y nadie quería gastar mucho dinero. Ahora puedo decir que comí McD’s en Roma. ;P Comí papas fritas, pero rizadas como en los carnavales. Después, fuimos al apartamento de Brukab y Sam para pasar el tiempo con ellos. Fuimos a otra gelatería que se llama “Gelato del Teatro.” No estaba mal, pero Giolitti todavía es la mejor (en mi mente).

Ayer fui a la clase, pero la profesora la canceló porque estaba enferma. Pues, como no tenía planes para nada, decidí hacer tarea, escribir diarios, etcétera. No hice casi nada hasta la cena, cuando fui con mis compañeras del apartamento (Anjali, Avery, Megan y Sterling) a un restaurante indiano que fue bastante bueno y bastante diferente de toda la comida italiano que he comido recientemente.

Todo por ahora, pero voy a escribir más pronto... ¡y poner fotos! J

lunes, 8 de setiembre de 2008

La primera entrada: los básicos

¡Hola, guapos!

Primero, déjame decir que no escribo ni historias ni el español tan bien. Lo siento por todos los errores aquí y si lo que escribo se aburre. Sin embargo, pensaba que sería una buena idea tener algún lugar donde la gente puede ir para leer sobre mis experiencias en Roma si quieren, sin que yo tenga que poder demasiados correos electrónicos en sus buzones.

Ahora, como algunos (¿todos?) ya saben, estoy en Roma para un programa especial con la UW. El programa se llama “La Educación, la inmigración y la identidad dentro de Italia,” y eso es lo que estudiamos. Por la historia, Italia ha mandado a muchos emigrantes a otros países, pero no ha recibido a muchos inmigrantes. Pues, hasta las décadas más recientes. De hecho, no había ninguna ley sobre la inmigración sola haste 1986. Desde este punto, el número de inmigrantes ha aumentado muchísimo. Como resultado, la reacción del gobierno y de la gente creó algunos problemas. Un de los problemas es la educación de inmigrantes y los hijos de inmigrantes. (Nacer en Italia no te garantiza la ciudadanía como en los EE.UU.)

Como parte del programa, leímos algunos artículos sobre la inmigración y la educación en Italia antes de venir y tenemos muchas actividades aquí. La mayoría del tiempo, vamos a organizaciones relacionadas o escuelas para ver, oír y/o hablar con la gente sobre el sujeto. Al fin del programa, vamos a escribir un ensayo y presentar en parejas sobre nuestra “especialidad.” La mía, con mi amiga Megan, es el lenguaje en la escuela.

Hasta luego,
Maia